01 octubre 2012

Las Hormonas del Cerebro

Ilustración del cerebro
Figura 1.- Cerebro. Tomada de
The Wellcome Library
Todos conocemos el papel del cerebro como centro del sistema nervioso, con sus neuronas que actúan a modo de transmisores de la señal eléctrica. También la rapidez y la precisión del impulso nervioso, gracias a esa forma tan particular de actuar las neuronas, que nos permite responder de forma casi instantánea a multitud de situaciones. Sin embargo, el cerebro también regula funciones fisiológicas algo más lentas, a través de la producción de hormonas que actúan sobre otras partes del cerebro o del organismo.



Hipotálamo, pituitaria (hipófisis) y glándula pineal del cerebro

Figura 2.- Las glándulas endocrinas del cerebro.


Desde el punto de vista endocrino, el cerebro contiene tres glándulas secretoras de hormonas: hipotálamo, pituitaria (hipófisis) y glándula pineal. Todas ellas son estructuras pequeñas y muy bien protegidas dentro del cerebro. En la tabla al final del texto podéis encontrar las hormonas que secretan cada una de estas glándulas.


Hipotálamo y pituitaria (hipófisis) en el cerebro

Figura 3.- Vista en 3D del cerebro con ciertas áreas en color. En rojo el hipotálamo
y en rosa la pituitaria (hipófisis).

La glándula pineal es una pequeña masa en forma de piña que puede apreciarse mediante rayos X cuando empieza a calcificarse en la segunda década de la vida. Aún es una gran desconocida, pero su irrigación sanguínea y conexiones nerviosas son muy ricas, por lo que es muy probable que tenga una función fisiológica más amplia de la que actualmente se conoce. Sintetiza y secreta la Melatonina, la hormona de la oscuridad o del sueño. Pero de ella te hablamos en este otro artículo (enlace)


Ilustración del hipotálamo y de la pituitaria anterior y posterior

 Figura 4.- Conexión hipotálamo-hipófisis


El hipotálamo y la pituitaria están estrechamente conectados, tanto físicamente como desde el punto de vista funcional. La pituitaria, también denominada hipófisis, tiene dos lóbulos: anterior (en amarillo en la figura 3; adenohipófisis) y posterior (en rosa en la figura 3; neurohipófisis), con funciones y formas de actuar claramente distintas. El hipotálamo a su vez es una glándula formada por neuronas. Desde el punto de vista endocrino, estas neuronas actúan de dos maneras. Por un lado, algunos tipos neuronales secretan hormonas a los vasos sanguíneos que conectan con el lóbulo anterior de la pituitaria (en amarillo) y de esta forma transportan las hormonas del hipotálamo a esa otra glándula. Una vez allí, regulan la secreción de sus hormonas, que se vierten al torrente sanguíneo para alcanzar otros tejidos. Por otro lado, otros tipos de neuronas extienden sus axones hacia el lóbulo posterior de la pituitaria (en rosa) y es allí donde liberan su contenido a la circulación sanguínea. De modo que estas hormonas se sintetiza en la cabeza de la neurona (soma), situada en el hipotálamo, tras lo cual viajan a través del axón de la neurona (cuerpo muy largo), situado en el lóbulo posterior de la pituitaria, lugar en donde ya pasan a la sangre y de ahí al resto de tejidos del cuerpo. Este complejo sistema dual es el responsable, entre otros, de la regulación del crecimiento, el funcionamiento de la tiroides y el riñón o el control del ciclo reproductor.



  
Tabla 1.- Hormonas producidas en el cerebro. 

Referencias
1.- “Lo esencial en Sistema endocrino y aparato reproductor”. M. Debuse. Harcourt Brace. 1998.

Imágenes
Figura 1.- Tomada de The Wellcome Library
Figura 2.- Imagen en el dominio público
Figura 3.- Autor: lifesciencedb (en Wikipedia)
Figura 4.- Modificado de Takumasa en Wikipedia (enlace)